5 razones para elegir un interruptor capacitivo

#1) Alta capacidad de respuesta

Los interruptores capacitivos son muy sensibles, lo que significa que "responden" al toque del usuario en cuanto éste hace contacto con la tecla. Incluso un leve toque desencadena inmediatamente una pulsación, lo que los convierte en una opción excelente para las empresas que necesitan interruptores con capacidad de respuesta.

#2) Sin riesgo de fallo mecánico

Con los interruptores capacitivos no hay riesgo de fallo mecánico. Esto se debe a que los interruptores capacitivos identifican las pulsaciones de las teclas midiendo un cambio en la capacitancia. Por lo tanto, no necesitan componentes mecánicos para funcionar. Mientras el interruptor capacitivo sea capaz de medir el cambio en la capacitancia, seguirá funcionando según lo previsto.

#3) Perfil bajo

También merece la pena mencionar que los interruptores capacitivos presentan un perfil bajo. Aunque son personalizables, suelen diseñarse con un perfil elegante y delgado para lograr un mayor nivel de estética y funcionalidad. Los interruptores de perfil bajo son más atractivos que los grandes y voluminosos. Pero lo más importante es que son más ergonómicos. El perfil bajo permite a los trabajadores utilizar fácil y cómodamente el interruptor capacitivo sin que sus manos sufran apenas tensión. Teniendo en cuenta que los trastornos musculoesqueléticos (TME) cuestan a las empresas millones de dólares al año, ésta es una gran ventaja de los interruptores capacitivos que no debe ignorarse.

#4) Opciones de placa de circuito impreso

Los interruptores capacitivos están disponibles tanto en placa de circuito impreso como en placa de circuito impreso flexible. La primera es la opción tradicional, que consiste en una placa rígida en la que se imprime un circuito, mientras que la segunda consiste en un material flexible en el que se imprime un circuito.

#5) Opciones de retroiluminación

Además de las placas de circuito impreso y las placas de circuito impreso flexibles, los interruptores capacitivos también están disponibles con distintas opciones de retroiluminación. Por ejemplo, puede optar por la retroiluminación electroluminiscente (EL) tradicional, o por el diodo emisor de luz (LED), más eficiente energéticamente. También existe la retroiluminación por fibra óptica, que utiliza hilos de fibra óptica por los que fluye la luz para iluminar el interruptor capacitivo.